Edificio del Centro de Estudios Rurales
Este edificio, vivienda-palacete urbano de primer tercio del siglo XX, situado en las inmediaciones del núcleo de Cabezón de la Sal, construido por la Real Compañía Asturiana de Minas, recoge las influencias de la arquitectura pintoresca europea, de las que ya se había hecho eco a principios de siglo José López Sallaberry, arquitecto del palacete de San Diego.
Presenta planta básicamente cuadrada y se desarrolla en tres alturas: la última, abuhardillada y con cubierta de pizarra a dos aguas en la parte anterior, y una más en la posterior. En el interior se puede contemplar la maravillosa armadura sustentante de la misma, con hileras, nudillos, pares y tirantes de madera, todos ellos al descubierto.
Los vanos se rematan con arco rebajado en todo el perímetro de las dos plantas, mientras el altillo solo tiene una ventana adintelada en la fachada principal, bajo la cubierta, a dos aguas, del módulo de acceso, muy peraltada.
Son de destacar sus jardines, conocidos como Los Jardines de María Blanchard, que contienen algunos de los árboles más singulares de Cantabria, recogidos de manera sistemática en el Catálogo de Árboles Singulares.
Desde 1987 hasta 2021, en virtud de un convenio entre la Corporación Municipal y la Universidad de Cantabria, el edificio fue cedido a esta última, para alojar el Centro de Estudios Rurales de Cantabria, donde se impartían cursos, seminarios y conferencias referentes a esta temática. El interior del edificio se podía visitar cuando se realizan actividades de la Universidad de Cantabria, destacando una exposición permanente de minerales con fines didácticos orientada a los estudiantes.
Jardines de María Blanchard
En el recinto del Centro de Estudios Rurales uno puede contemplar un bonito jardín dedicado a la pintora María Blanchard y en el que se encuentran ejemplares de arce, magnolio, palmera, tilo, etc. así como destacados ejemplares de:
• El Cedro glauco es un árbol de la familia Pinaceae. Su origen está en Marruecos y Argelia, en la zona de las montañas del Atlas.
Especie perennifolia de porte piramidal que, con su copa cónica y ancha, puede alcanzar en su desarrollo los 40 metros de altura. Presenta una ramificación oblicua y dispuesta en pisos.
Sus acículas puntiagudas tienen un color verde-azulado oscuro. Septiembre es su época de floración. Su tronco, de color grisáceo-parduzco, presenta un aspecto escamoso y algo agrietado, desprendiéndose en láminas. Se trata de la especie de cedro más resistente. La madera, de color rojizo, fragante y duradera, se utiliza en carpintería, ebanistería y en la fabricación de lapiceros.
Se puede observar un ejemplar significativo de 3,3 metros de cuerda.
• El Gingko es un arbol de familia Gingkoaceas. Su origen en encuentra en China.
Se trata de una especie caducifolia que, con su porte piramidal y su copa delgada, puede llegar hasta los 30 metros de altura. Presenta una ramificación abierta y oblicua hacia arriba. Sus hojas son planas, en forma de abanico y de color verde claro, aunque se vuelven amarillas en el otoño. Los dos lóbulos de estas le otorgan su nombre “biloba”. Marzo y abril son los meses en que se produce la floración, observándose unas flores de color amarillo. Su tronco, de tonalidad gris-pardusca o pardo-oscura, presenta una corteza con numerosas hendiduras y abombamientos, y se estrecha en altura.
Es un árbol muy resistente, y, además, esta especie es la única representante viva del grupo de las gimnospermas. Apenas se encuentran ejemplares en estado natural o silvestres.
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