Grace (Annette Bening, American Beauty) y Edward (Bill Nighy, Su mejor historia) llevan casados 39 años. Su matrimonio es aparentemente perfecto. Un fin de semana, su hijo Jaime (Josh O’Connor, Florence Foster Jenkins) decide visitarles. Para su sorpresa, se entera de que Edward planea dejar a su madre al día siguiente. La película sigue, entonces, a tres personajes que pasan por fases de estupor, negación y furia. ¿Seguirá vivo el matrimonio tras esta crisis?