Casar

Casar de Periedo

Casar de Periedo es un pueblo de gran importancia y protagonismo dentro de nuestro Ayuntamiento. No en vano, es el pueblo del municipio que cuenta con mayor número de habitantes, después de Cabezón de la Sal. Si vamos recorriendo el valle en dirección Este, es el último pueblo del municipio, punto por el cual linda con el pueblo de Caranceja, perteneciente al municipio de Reocín. Cuenta con un importante legado arquitectónico, con un buen número de casonas, alguna casa llana del siglo XV, el Palacio Gómez de la Torre, tres ermitas de los siglos XVI y XVII, y un humilladero del siglo XVIII, entre otros.

Leer más…

¿Qué ver y hacer en Casar de Periedo?

Explorar Casar de Periedo

Casar se sitúa en el extremo nordeste del municipio en la ribera de curso bajo del río Saja. Está delimitado por los trazados del ferrocarril y de la carretera nacional N-634 que atraviesa el núcleo. El casco urbano, más tradicional, tiene una estructura alveolar, con edificación básicamente unifamiliar en hileras o aislada, con una malla viaria delimitada por cierres tradicionales de tapias de piedra. Destacan también, por su singularidad, numerosas casas y casonas catalogadas.

Entre sus edificaciones más importantes destaca el Palacio Gómez de la Torre o Casa-Museo Jesús de Monasterio, en la que vivió el violinista y compositor lebaniego, siendo enterrado en la iglesia parroquial de Periedo. Es un edificio de gran singularidad y valor arquitectónico destacable, incluido en el Inventario General del Patrimonio Cultural de Cantabria. Enfrente del palacio está el edificio de “Las Cocheras del Palacio”, que hoy es el Centro Cultural “José Manuel de Monasterio”, y está a disposición de los vecinos para la realización de variadas actividades.

Casar es un pueblo con muy buenas dotaciones. Prueba de ello es que puede presumir de tener un consultorio médico rural, la única escuela rural de la zona (C.E.I.P. Antonio Muñoz y Gómez), el museo de la Escuela Rural en la capilla de la Virgen de la Barca, un complejo deportivo, constituido por dos piscinas municipales descubiertas (una de ellas para niños), que permanecen abiertas en época estival, y una pista polideportiva cubierta para jugar a futbito y baloncesto.

En las proximidades de la estación del ferrocarril en Casar de Periedo, existen unas peñas de piedra con una pared de una gran verticalidad, apta para la escalada en roca, por lo que numerosos grupos de escaladores acuden a practicar este deporte.

Tienen fama sus alubias, y por ello se celebra anualmente una Feria de la Alubia y la Hortaliza, cada 2º domingo de noviembre, catalogada como Fiesta de Interés Turístico Regional. Una feria que inspira grandes recuerdos gracias a sus amables vecinos, que nos trasladan por un día a los años cuarenta, cuando se pasaban grandes penurias. La feria cuenta con gran afluencia de público de toda la región, e incluso de regiones limítrofes (la alubia roja de Casar es muy apreciada por los vascos).

En el río Saja se celebran concursos de pesca como el Open de Pesca de Mosca. La pesca de trucha es muy conocida en el Coto de Pesca de Caranceja, donde se puede pescar con cebo natural y se encuentran ejemplares de trucha de gran tamaño en la temporada de pesca, que suele comenzar en abril y terminar en julio.

Destacable en el terreno deportivo, es también la prueba deportiva de montaña conocida como La Vueltuca Sopera de Casar, que se celebra cada año en el mes de Junio, y que consta de diversas modalidades como son la BTT, la prueba de Andarines o ruta a pie, la Trail o corriendo, y la modalidad inclusiva de 14 Km.

Por otra parte, destaca también en Casar el juego de bolos, ya que existe entre sus habitantes una gran afición a este juego típico de nuestra tierra. Cabe destacar que Casar posee una nutrida escuela de bolos de gran relevancia y que cuenta con un destacado equipo femenino. La Peña bolística de Casar de Periedo organiza anualmente en agosto, el tradicional Torneo de Bolos de “San Lorenzo”, para jugadores de primera categoría y con motivo de la festividad que lleva el mismo nombre, así como el “Memorial Paulino Viota”. Claro ejemplo, y máximo exponente de la importancia que a lo largo de la historia han tenido los bolos en Casar, es don Ramiro González, “El Chaval de Casar”, que fue cinco veces Campeón de España de bolo palma, además de ganar varias ligas y campeonatos regionales. Recibió la Insignia de Oro de la F.C.B., y la Medalla de Oro al Mérito del Deporte del Gobierno de Cantabria. Junto a la bolera de San Lorenzo, podemos ver un busto en el que se puede leer : “Al chaval de Casar – Ramiro González – Casar 1999”, hecho en piedra y sobre un pedestal.

Compartir:

Top
Left Menu Icon