24 horas en Cabezón de la Sal
Un día en Cabezón de la Sal basta para captar el ambiente de esta tranquila capital Comarcal.
La villa de Cabezón de la Sal, situada entre la costa y primera linea de la montaña de Sierra del Escudo de Cabuérniga, tiene una historia milenaria y sigue siendo una capital con el ambiente de una pequeña ciudad en la que resulta fácil sentirse a gusto.
Cabezón de la Sal puede parecer un destino de vacaciones poco convencional pero cuando conozcas la villa seguro que te encantará. Es un destino seguro y saludable, con un entorno que emociona. Descubre lo mejor que puede ofrecerte.
Cabezón de la Sal apuesta por modelos de desarrollo turístico sostenibles. Si no dispones de transporte propio o no quieres venir en coche, es fácil moverse en transporte público gracias al frecuente tren de cercanías y autobuses interurbanos. La duración de los trayectos es muy razonable, por ejemplo 60 minutos Cabezón-Santander capital.
En los trenes de cercanías se puede llevar la bici sin cargo. En Cabezón hay alquiler bicicletas que te permitirán llegar a algunos de los destinos y recursos turísticos cercanos. Tardarás 1 hora y 30 minutos (20 km) en recorrer todo el valle sin paradas. El núcleo urbano se puede recorrer perfectamente a pié o en bicicleta.
Puedes encontrar más información en Consejos e Información del viaje.
Para ser una ciudad relativamente pequeña, la Villa de Cabezón de la Sal tiene varios Museos que merece la pena visitar. Dado que solo dispones de un día, te sugerimos cuatro de ellos para elegir: el Museo del Arte Textil y el Museo del Traje Regional, ubicados en el mismo edificio, el singular Museo de Calabozo y el Poblado Cántabro, situado en altozano del conocido “Picu de La Torre”, pequeña elevación junto al casco histórico de Cabezón.
Cabezón de la Sal y sus pueblos están llenos de lugares de interés cultural que te deleitarán y te contarán la interesante historia de nuestro valle. Explora nuestro legado arquitectónico y cultural, visita las iglesias, descubre las casonas y palacios, callejea por el casco histórico y las zonas rururbanas y acércate a los pueblos más próximos a la Villa.
09h00: Cabezón de la Sal se despierta con un café.
Lo primero es lo primero. Los cabezonenses son fieles consumidores del café mañanero. Si necesitas tu dosis de cafeína diaria, puedes acudir a alguno de los numerosos cafés o bares que hay en Cabezón de la Sal. Mientras disfrutas de tu café puedes echar un vistazo al periódico local o tomar alguno de los ricos y variados desayunos que se preparan en estos locales.
10h00: Visita cultural callejeando y las tiendas de paso.
Una de las múltiples posibilidades para visitar Cabezón de la Sal es la Ruta autoguiada. Un recorrido por el Casco histórico, Cabezón nobiliario y el barrio de La Pesa, quizá el más antiguo. Conocerás nuestro legado arquitectónico: casas, casonas y palacios de arquitectura montañesa y contemporánea, arquitectura religiosa de estilo barroco montañés, parques y jardines. Descubrirás parte de nuestro legado cultural e historia, gente, curiosidades, secretos de la Villa, y obras benéficas que dejaron los Jándalos.
Vale la pena acudir a la Iglesia Parroquial de San Martín para disfrutar de unos momentos de tranquilidad. Construida a principios del siglo XVIII conserva todo su encanto con su campanario-torre visible desde cualquier rincón de la Villa.
Aprovecha el recorrido para detenerte en los museos. Desde el Centro de Estudios Rurales en el barrio de La Pesa, cruzando las vías del tren, encontrarás a unos metros el Museo del Arte Textil y el Museo del Traje Regional ubicados en un mismo edificio. Las visitas a estos museos son guiadas y duran aproximadamente 30 minutos.
Retomando el recorrido autoguiado en dirección al centro de Cabezón, llegarás al Edificio de la Torre donde está ubicado el Museo del Calabozo del siglo XVIII. La visita a este museo también es guiada y dura unos 15 minutos. A poca distancia de este museo termina el recorrido autoguiado. Pero todavía tienes tiempo para visitar el Poblado Cántabro con la visita guiada que dura unos 45 minutos.
Consulta en el apartado Agenda los horarios y las condiciones de visita.
Durante el recorrido pasarás por numerosas tiendas que ofrecen gran variedad de artículos de todo tipo, por lo que es también el momento perfecto para, de paso, ir de compras y llevarte un recuerdo o regalo del Comercio de Cabezón.
Si tu escapada coincide con el Mercado semanal (todos los sábados del año) podrás disfrutar con los cinco sentidos de las exquisiteces locales y regionales.
13h00: La hora de aperitivo.
“La cultura del vino blanco” se ha preservado y persiste entre lugareños el habitual encuentro matinal de amigos y peñas, disfrutando del rico blanco de solera de la Nava y sabrosas tapas de borono de Santibáñez cocinado “como antes” al fuego lento de zarzo de avellano, o torreznos, entre otras. Dicen que uno de los mejores aperitivos es un “manchado”, a medio camino entre vino blanco y mistela acompañado con un excelente queso artesano de oveja de Sopeña o unos de los riquísimos quesos de Labarces.
Son numerosos los bares que ofrecen vermouth con carácter y cañas bien tiradas acompañadas de pinchos, tapas variadas y ricos calditos con los que te obsequian en los días fríos.
14h00: La hora de la comida para los cabezonenses.
La mayoría de los locales hosteleros ofrecen comida tradicional y platos de estilo montañés. Otros combinan platos clásicos con cocina moderna. También encontrarás menús del día, raciones, hamburguesas artesanales, pizzas, etc. Hay cocina para todos los gustos; puedes descubrir la Cultura gastronómica de Cabezón echando un vistazo en el enlace Dónde comer.
16h00: Siente el efecto relajante del agua.
Para bajar la comida nada mejor que dar un relajante paseo. Te proponemos un recorrido circular, tal y como lo hacen los cabezonenses, por la mies de la zona rururbana, área rural que convive con la zona urbana por su cercanía. En esta zona todavía se puede observar la actividad agraria de los lugareños, con sus huertas y ganado pastando. Es un paseo muy recomendado para familias con niños.
Paseando entre estos prados y huertas, llegarás a la Senda fluvial del Minchón, de gran valor ecológico y paisajístico que transcurre por la orilla izquierda del río Saja entre las localidades de Carrejo y Ontoria. Disfrutando de este maravilloso y tranquilo paseo a pie o en bicicleta a lo largo de su cauce, llenarás los pulmones del aire fresco que trae el río desde las tierras altas de la Cordillera Cántabra.
Te recomendamos visitar los cercanos pueblos de Ontoria y Vernejo y de paso conocer su rico patrimonio.
Otro recorrido circular que te proponemos es la Ruta de la Fontanuca, un breve paseo con el punto de partida y llegada en la Plaza Virgen del Campo, frente al ayuntamiento de Cabezón de la Sal.
En verano, uno de los mejores lugares para relajarse es la Campa Santa Lucia con la playa junto al río Saja donde los “valientes” pueden lanzarse a sus frías aguas.
Si dispones de transporte propio y te apetece disfrutar de otra manera muy agradable de ver la ciudad y el valle desde la altura, te recomendamos visitar El Balcón del Valle y dar un paseo por los núcleos rurales de Bustablado y Duña. Podrás visitar incluso el cercano Bosque de castaños de los Coborros.
Puedes acercarte a los pueblos de Periedo, Casar de Periedo, Carrejo y Santibáñez. O visitar el Bosque de Secuoyas, lugar reconocido como Monumento Natural.
20h00: Hora de cenar y de tomar una copa.
Consultar el apartado Dónde comer y encontrarás una amplia variedad de establecimientos. Puedes hacer un recorrido por algunos de estos locales para tomar algo en cada uno de ellos y compartir platos. También hay restaurantes tipo “bistró” de ambiente relajado que sirven platos sencillamente deliciosos.
Y para rematar un día intenso de encuentro con Cabezón de la Sal y su legado cultural, natural y gastronómico te recomendamos tomar una copa en alguno de los míticos locales como El Reino Ecobar, El Vinilo, El Jardín, Disco-bar Netova, El Caipal, Disco-bar Cernégula y El Duende Copas. Consulta el apartado Dónde tomar copas.
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